En el tiempo que vivimos, el estrés es el compañero diario de los seres humanos en todo el planeta, se presenta de manera diferente en cada uno, y en diferente intensidad, ¿la causa? mil motivos diferentes, desde las deudas impagas hasta la incertidumbre por el mañana. Lo cierto es que cuando vivimos una experiencia que nos sobrepasa, todo nuestro ser entra en estado de alarma y ocurren una serie de cambios a nivel físico, emocional y conductual. Empezamos un peregrinaje experimentando toda una avalancha de sentimientos que incluyen la negación y la ira y luego llegamos a un sendero en el que está ausente la esperanza.
En verdad nuestro organismo tiene una gran capacidad de resistencia, funciona maravillosamente para afrontar experiencias que nos sobrepasan, sin embargo, tiene también un límite y mientras estamos en el camino, llega un día en el que vislumbramos la esperanza. ¿De dónde obtenemos nuevos brios? Desde hace mucho se sabe que la necesidad despierta nuestros recursos personales. Interiormente sentimos que nuestra vida es una oportunidad que termina con la muerte y decidimos usar esta oportunidad, advertimos que nuestra vida es importante para otros, que tenemos recursos para servir a otros, nuestro amor propio nos recuerda que nuestra vida es valiosa, que tenemos algo valioso para compartir con los demás y decidimos dejar huellas de amor en este mundo. En definitiva, encontramos el sentido de nuestra vida y al hacerlo, descubrimos cómo actuar frente a las dificultades que la vida nos ofrece.
La verdad, es que el dolor, las dificultades, los cambios inesperados, son parte de la vida y muchas veces necesitamos de otras personas para enfrentarlos y vencerlos o adaptarnos a ellos. Para ello, estamos en este espacio virtual, para acompañarlos en esta aventura y compartir cómo aplicar los primeros auxilios emocionales a fin de que el sufrimiento se acorte, obtenga la victoria y el aprendizaje de una manera más dulce, en el menor tiempo posible. Somos compañeros en el peregrinaje de la vida y cuando nos juntamos, nuestra luz es más intensa en medio de la oscuridad.